martes, 15 de noviembre de 2011

Papá

Gracias. Esto siempre solía ponerlo al final, pero realmente me gusta donde está por ser tú.
¡Sorpresa! alguien nuevo llegó a tu vida, quien diría que con una vida tan fantástica por delante, quien diría que alguien como tú iba a ser mi mejor ejemplo a seguir, pero así fue y sigue siendo.
Miles de razones y motivos me ha conmovido hoy para dedicarte esto. No es nada, pero sé que te gustará.
Llegué a este mundo con una misión, como todo el mundo, pero esta en especial fue no separarme nunca de ti. Llegará el momento en el que tu tomes otro camino, llamémosle << un viaje al otro mundo >> pero ahí estarás tú, esperándome de nuevo, como cuando lo estuviste haciendo durante nueve largos meses.
Luego empezaba lo difícil, aprender a luchar por sí misma, independizarme dentro de mí... pero eso sí, siempre con tú ayuda. Sí de algo se puede estar agradecida es de los cinto un momentos que has estado ahí.
Una risa para alegrar nuestros días, una comida sin sal y ni una sola queja de la etiqueta de Carrefour de esas napolitanas que me tranquilizan el hambre de querer comerte a besos. Sin olvidar los treinta días que tiene que esperar la tienda 24 horas para que un chico alto, moreno y de ojos azules, entre con cara de.. "Una magdalena de caramelo, por favor."
te lo digo al principio y te lo digo al final, Gracias. Te quiero Papá.

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